Asumiendo mi realidad de estudiante frustrada en
Tengo 22 años y debería estar terminando la carrera de Pedagogía en castellano y Comunicación; no obstante las cosas no ocurrieron así.
Desde que ingrese a la carrera me di cuenta que nunca fue como me lo imagine, pero esta historia parte de mucho antes, desde que estaba en el colegio; siempre me decían que mi futuro estaba en estudiar leyes, dado que tenia vocación (según muchos) para defender causas que se consideraban perdidas junto con un afán por proteger al desprotegido; no obstante nunca me gusto mucho al idea de estudiar algo donde estuviera llena de libro aprendiéndome códigos y además teniendo que estar todo el día con traje formal, por ende esta idea fue desechada por mi mente.
Luego comenzó a picarme el bichito por el periodismo, soñando con ser corresponsal, siendo enviada a lugares en los cuales nunca imagine estar y reporteando realidades que se ven tan distantes a nuestra vida cotidiana, pero aparecieron los millares de cifras de estudiantes de periodismo que existen en la actualidad, así que dije no mejor no, luego pensé en psicología, porque me encanta escuchar a las personas y siempre trato de hacerlas entender que sus problemas finalmente no son tan graves como uno lo piensa, pero medite con lo llorona que soy y lo hiperquinetica, no podré estar escuchando a tanta gente con problemas, además que sentía que nunca me iba a llenar del todo esa profesión.
Finalmente llego a mi sin querer un mail señalando la carrera de Sociología, y me di cuenta que contenía de todo con lo que yo siempre había soñado, tenia un poco de leyes, de periodismo, de psicología, de relaciones publicas, hasta de literatura; y pensé “ohhhh por fin encontré una carrera donde me proyectaba al máximo, haciendo charlas, analizando diferentes contextos socio culturales, tirando proyectos para mejorar la calidad de vida, en fin todo un mundo nuevo”; y, de repente todo se fue “a las pailas”, mi papá se dio cuenta de que esa carrera no estaba en la ciudad y que costaba como $2.000.000 así que me dijo lo siento no nos va a alcanzar para pagarte todo lo que necesitas y crédito fiscal no te van a dar, me sentí devastada y a los días resignada.
Al final llego diciembre del 2002 rendí
Llegado el momento hable con mis padres, lo tomaron pésimo, pero me comprendieron, me dijeron que pensará bien que iba a hacer, pero que afuera no estudiaría, ya que el tema de la plata seguía siendo un impedimento.
Decide entrar a lenguaje y comunicación, que si es como castellano, pero egresare como periodista y no como profesora.
Ahora estoy en eso y las cosas ahora si que son diferentes…
CONTINUARÁ…